Las 19 cláusulas más absurdas jamás vistas en los contratos de fútbol
El fútbol no se trata solo de goles, trofeos y estadios repletos. A veces, lo que ocurre tras bambalinas es incluso más fascinante — y realmente insólito. Desde cursos de cocina hasta jets privados, aquí están 19 de las cláusulas más sorprendentes que se han incluido en contratos de futbolistas.
Lionel Messi – Cláusula Cataluña
Cuando Lionel Messi firmó uno de los contratos más lucrativos en la historia del deporte con el FC Barcelona, aceptó integrarse plenamente en la sociedad catalana, incluso aprendiendo catalán. Más curioso aún, su contrato estipulaba que podía marcharse gratis si Cataluña se independizaba. Messi abrazó la idea y así se convirtió no solo en el mayor ídolo del club, sino también en un hijo de la ciudad.
Cristiano Ronaldo – Cláusula de 1.000 millones de euros
El Real Madrid colocó en el contrato de Cristiano Ronaldo una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros. No porque pensaran que algún club la pagaría, sino para garantizar que nadie pudiera llevárselo sin sentarse primero a negociar. El presidente Florentino Pérez siempre dejó claro que estas cláusulas no estaban pensadas para hacerse efectivas.
Neymar – Cláusula de amigos de visita
Para evitar que Neymar sufriera nostalgia tras llegar a Barcelona, el club aceptó traer cada quince días a su grupo íntimo de amigos brasileños, conocidos como “The TIOSS”, con todos los gastos pagos. Así, Neymar se mantuvo feliz fuera del campo, lo que claramente benefició su rendimiento.
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Keisuke Honda – Cláusula de coche blindado
Al fichar por Botafogo en Brasil, el japonés Keisuke Honda exigió un coche blindado, preocupado por la criminalidad en Río de Janeiro. El club accedió, con la esperanza de que pudiera concentrarse solo en el fútbol. Sin embargo, Honda se marchó antes de cumplir un año.
Radamel Falcao – Cláusula de rodilla frágil
Manchester United temía por las lesiones recurrentes en las rodillas de Radamel Falcao durante su cesión. Por eso incluyó una cláusula que permitía rescindir el contrato sin penalización económica si el problema reaparecía. Tras anotar solo cuatro goles en 29 partidos, el club decidió no comprarlo.
Stefan Schwarz – Cláusula de viaje espacial
En 1999, el Sunderland incluyó una curiosa cláusula en el contrato del sueco Stefan Schwarz que le prohibía ir al espacio. Uno de sus asesores ya había reservado un billete para un futuro vuelo espacial comercial, y el club quería asegurarse de que Schwarz no lo acompañara.
Dennis Bergkamp – Cláusula sin aviones
La leyenda del Arsenal, Dennis Bergkamp, sufría un miedo extremo a volar. Por ello negoció una cláusula que lo eximía de tomar aviones. Apodado “El holandés no volador”, viajaba en tren o autobús y se perdía varios partidos europeos fuera de casa — aunque su calidad compensaba esas ausencias.
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Samuel Eto’o – Cláusula de jet privado
QCuando Samuel Eto’o firmó con el Anzhi Makhachkala, eligió vivir en Moscú, a más de 1.600 km. Su contrato le garantizaba un jet privado para ir diariamente a entrenar. Para el futbolista mejor pagado del mundo en ese momento, era algo completamente natural.
Georg Koch – Cláusula anti-racismo
El portero alemán Georg Koch incluyó en su contrato con el PSV Eindhoven una cláusula especial que le permitía abandonar el club si sufría insultos racistas. Tristemente, tuvo que hacerla efectiva a los tres meses, regresando a Alemania ante la hostilidad de la afición.
Mario Balotelli – Cláusula de buena conducta
Liverpool añadió al contrato de Mario Balotelli una cláusula de “buena conducta” para controlar sus travesuras. Sorprendentemente, funcionó: no recibió ninguna tarjeta roja durante su paso por Anfield, aunque su rendimiento no siempre convenció.
Luis Suárez – Cláusula de no morder
Tras sus famosos mordiscos jugando con el Ajax, Liverpool y Uruguay, el FC Barcelona habría incluido en el contrato de Luis Suárez una cláusula que le prohibía volver a morder. El presidente Bartomeu siempre lo negó, pero conociendo el historial de Suárez, suena bastante creíble.
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Ronaldinho – Cláusula de dos noches de fiesta
De regreso a Brasil con Flamengo, Ronaldinho no estaba dispuesto a renunciar a la vida nocturna. Su contrato especificaba que podía salir de fiesta dos veces por semana sin riesgo de multas ni sanciones. Incluso en el ocaso de su carrera, el brasileño sabía cómo equilibrar el ocio con el fútbol.
Alex Oxlade-Chamberlain – Cláusula de los 20 minutos
Arsenal debía pagar 10.000 libras a Southampton cada vez que Alex Oxlade-Chamberlain jugaba 20 minutos o más. Los aficionados pronto notaron que solía entrar al campo alrededor del minuto 71 — una estrategia astuta para reducir costos.
Neil Ruddock – Cláusula de peso
El Crystal Palace incluyó una reducción salarial del 10% si Neil “Razor” Ruddock superaba los 99,8 kg, que ya era bastante. ¿Resultado? Fue multado ocho veces en seis meses, demostrando lo difícil que le resultaba mantenerse por debajo del límite.
Roberto Firmino – Cláusula anti-Arsenal
Liverpool no había olvidado la famosa oferta de 40.000.001 libras del Arsenal por Suárez. Por eso, cuando firmaron a Roberto Firmino, su cláusula de rescisión de 98 millones de euros aplicaba para todos los clubes… excepto el Arsenal.
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Giuseppe Reina – Cláusula de casas
El delantero alemán Giuseppe Reina logró que el Arminia Bielefeld le prometiera construir una casa por cada año de contrato. Como no se especificó el tipo, el club le entregó tres pequeñas casas… de LEGO. Así cumplieron la letra del contrato, aunque no su espíritu.
Stig Inge Bjørnebye – Cláusula anti-esquí
Ex saltador de esquí, el noruego Stig Inge Bjørnebye firmó con Liverpool una cláusula que le prohibía acercarse a menos de 200 metros de una pista de esquí. Teniendo en cuenta la trayectoria olímpica de su padre en este deporte, la precaución estaba justificada.
Rolf-Christel Guie-Mien – Cláusula de clases de cocina para su esposa
Al llegar al Eintracht Frankfurt, el congoleño Rolf-Christel Guie-Mien exigió que el club pagara clases de cocina para su esposa. Creía que eso ayudaría a su familia a adaptarse mejor a Alemania a través de una gastronomía más variada.
Rafael van der Vaart – Cláusula prohibiendo botas rojas
El Betis prohibió a Rafael van der Vaart usar botas rojas, los colores del eterno rival, el Sevilla FC. A cambio de este sacrificio estético, cobró más de 1,6 millones de euros durante su etapa en Andalucía — un pequeño precio para proteger el orgullo del club.
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