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La tarjeta roja “lo cambió todo”, admite Flick

Mantener la perspectiva tras la derrota

Después del encuentro en Londres, el entrenador del Barça, Hansi Flick, señaló que el equipo debe asumir el golpe y centrar su atención en los tres partidos que restan de la fase de grupos.

El técnico alemán habló con los medios en un tono tranquilo y medido, y explicó que la frustración era comprensible, pero no debía oscurecer la situación general. El Barça había entrado al duelo igualado en puntos con sus principales rivales del grupo, y aunque el resultado fue duro, no es decisivo para su clasificación.

Flick reconoció que el marcador fue decepcionante, pero instó a sus jugadores y a la afición a entender la campaña como un proceso más largo, no como una noche que define el rumbo definitivo.

Recordó además que el equipo había mostrado señales de mejora en los últimos partidos de liga y que todavía dispone de margen para seguir creciendo.

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Asumir la responsabilidad

Según lo expresado en la rueda de prensa posterior al encuentro, Flick reiteró que no buscaba excusas por la derrota 3,0 en Stamford Bridge.

Repitió uno de sus mensajes clave de la noche y dijo a los periodistas: “We have to accept the defeat and stay positive for what comes next”. A su juicio, el resultado no modifica la intención del club de luchar por todos los puntos restantes del grupo. Flick añadió: “I saw positive things and I believe we can still take the nine points left to play for”.

El técnico también se refirió a un momento importante al inicio del partido, cuando Ferran Torres dispuso de una gran ocasión en el minuto cinco. Flick aseguró que el equipo empezó bien y tuvo una oportunidad muy clara para marcar el primer gol, una acción que podría haber cambiado el ritmo y la confianza del grupo.

Un punto de inflexión decisivo

Flick dejó claro que la expulsión pocos minutos después echó abajo el plan de partido. En sus palabras: “[…] then the red card changed the match, and it is not easy to recover against a team like Chelsea when you are a man down”.

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La inferioridad numérica obligó al Barça a adoptar un planteamiento mucho más defensivo durante la mayor parte del encuentro, lo que redujo su capacidad para presionar y mantener la posesión ante un Chelsea físicamente fuerte.

El técnico señaló que jugar con un hombre menos obligó al equipo a defender más atrás de lo previsto, dificultando la creación de ritmo y presencia en el centro del campo.

Aspectos que deben mejorar

A pesar del condicionante de la expulsión, Flick no dudó en señalar los aspectos que, a su juicio, deben corregirse. Comentó que el equipo perdió balones fáciles y debe aumentar el ritmo, la agresividad y la toma de decisiones.

También recordó que en los últimos compromisos de LaLiga el Barça ya venía trabajando para mejorar las transiciones y la recuperación del balón.

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Aseguró que estos puntos seguirán formando parte del proceso de evolución previsto para las próximas semanas.

Los partidos que quedan

Flick insistió en varias ocasiones en que cualquier valoración del rendimiento debía tener en cuenta el largo tramo del encuentro en el que el equipo jugó con diez futbolistas.

Recordó que restan tres partidos de la fase de grupos, tiempo suficiente para estabilizar los resultados y recuperar sensaciones.

El equipo volverá a los entrenamientos antes del fin de semana con el objetivo de recuperar confianza y preparar el próximo rival europeo, que actualmente se encuentra justo por encima del Barça en la clasificación.

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Flick cerró sus declaraciones con un mensaje de resiliencia. Su idea fue clara: aceptar el golpe, aprender de él y afrontar los últimos compromisos con determinación y claridad.

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