Cuando se trata de dinero, Cristiano Ronaldo sigue siendo el rey. La superestrella portuguesa ha vuelto a dejar atrás a la competencia y ha ocupado el primer lugar en la lista de Forbes de los atletas mejor pagados del mundo. Con unos ingresos impresionantes de más de £206 millones el año pasado, el astro de 40 años demuestra que no solo marca goles, sino también contratos y patrocinios como nadie más.
Mientras Lionel Messi cae en la clasificación, Tyson Fury se abre paso hasta el podio, acompañado por la leyenda del baloncesto Steph Curry y varios clubes millonarios saudíes en segundo plano. Si existiera una medalla de oro por los sueldos, Ronaldo la ganaría de calle.
Fury entra en el top 3 – Messi baja posiciones
En segundo lugar está la leyenda de la NBA Steph Curry, quien en una temporada histórica – donde se convirtió en el primer jugador en alcanzar los 4.000 triples – obtuvo ingresos de £117 millones.
Pero quizás la mayor sorpresa es el británico Tyson Fury, que ocupa el tercer puesto con £109 millones. El boxeador de peso pesado, de 36 años, ganó ese dinero gracias a sus dos megacombates contra el ucraniano Oleksandr Usyk en Riad. Fury perdió el título en diciembre y anunció (una vez más) su retirada – aunque ya está bajo presión para regresar.
Messi aún en el top 5 – pero sintiendo la presión
Lionel Messi, el eterno rival de Ronaldo, tiene que conformarse con el quinto puesto en el ranking de este año. Ganó £101,4 millones, de los cuales aproximadamente la mitad proviene de patrocinios, incluido un lucrativo acuerdo para promocionar Arabia Saudí como destino turístico. Actualmente, Messi juega en el Inter Miami de Estados Unidos.
La liga saudí está dejando cada vez más huella. Karim Benzema, del Al-Ittihad, también entra en el top 10 con £78,2 millones en ingresos, lo que le otorga la octava posición en la lista.
La cima del ranking la completan nombres conocidos como LeBron James, Kevin Durant, el mariscal de campo de la NFL Dak Prescott y las estrellas del béisbol Juan Soto y Shohei Ohtani.
Así, Ronaldo rompe otro récord – no en el campo, sino en su cuenta bancaria – y confirma su estatus como la mayor máquina de hacer dinero del deporte.
Fuente: Daily Mail